DOBLE SENSACIÓN AMARGA

El 6-1, 6-4 y 6-3 en favor de República Checa en el punto del dobles resiste al análisis y sería inútil discutir un resultado de una pareja que a priori era superior. Sin embargo, esa supremacía no se vio en la cancha. ¿Cómo? ¿Y el marcador abultado, entonces? Se preguntarán ustedes... La respuesta se halla en los rendimientos individuales: Radek Stepanek, como inflador anímico de los locales, fue lo mejorcito pese a no estar del mejor modo físicamente. Pero con la gran predisposición y confianza le alcanzó. Lo de Tomas Berdych fue flojo, estuvo lejos de deslumbrar y estar contagiado por su enérgico compañero. Fueron pocos sus aciertos y las dudas exhibidas tuvieron que ver con un viernes que lo dejó titubeando tras su ajustada victoria ante Mónaco en el single. José Acasuso aprobó: arrancó tarde el partido en el segundo set, se ajustó recién en ese parcial y demostró el aplomo y la experiencia en Copa Davis. Aunque los nervios llegaron del lado de Leo Mayer. El correntino fue el más errático de los cuatro, estuvo lejos de su buen nivel desde que explotó y la tensión del debut se lo fue consumiendo. Hasta el punto que rompió su raqueta de la bronca, lo que dejó en claro que estaba disconforme con su rendimiento.

Un fallo del árbitro cuando Argentina se encontraba con quiebre arriba, 2-1 en el tercero y 40-40, con un saque de Acasuso sobre la línea y que él juez de silla cantó mala, terminó de hacer explotar a los de Tito Vázquez. Ahí la dupla nacional cayó a pique, sin embargo no fue éste el principal argumento de la derrota.

Desmenuzando de este modo el tercer punto de la eliminatoria, se puede afirmar que los checos ganaron con poco, y no justamente porque no precisaron pisar el acelerador, como se dice habitualmente, sino porque, si se los exigía, no estaban en un día maravilloso como para responder con la lucidez que acarreaban como dupla que asustaba.

La obligación ahora es de Argentina. Para levantar el 1-2 precisará que Juan Martín del Potro derrote a Tomas Berdych, lo que puede ser posible por el inestable fin de semana del checo; Y por último, seguramente, Juan Mónaco, a lidiar y buscar el batacazo con Radek Stepanek. ¿Será duda por lesión el local? Imposible. Luego del mal rendimiento de Ivo Minar el primer día y que el capitán checo Navratil reservara a Stepanek, es indudable que estará en el hipotético choque decisivo.

GERMÁN MARTINA