En menos de 24 se conocieron los dos ascendidos a Primera División. Ya lo habían conseguido los tucumanos y Chacarita dependía de sí mismo para subir. Fue en un instante, un minuto agónico cuando el partido se extinguía y parecía que debían esperar una fecha más para sellar su objetivo. Pero a los 45 de la segunda parte, apareció Mariano Echeverría luego de un centro que atravesó el área sin oposición de los defensores de Platense y el mediocampista aprovechó para fusilar al arquero y desatar la locura. Los Funebreros concretaron el ascenso, con una buena campaña, un desempeño regular de todos los jugadores y un planteo inteligente de su DT, el Ruso Ricardo Zielinsky. El partido ante el Calamar resultó muy parejo, ambos tuvieron sus oportunidades aunque se cuidaron demasiado para no perder. Sin embargo la necesidad de ascender corría por el lado de Chaca y, en los últimos minutos, se empezó a notar ese interés. Así, con mucho esfuerzo, lograron el acceso a la máxima categoría del futbol argentino después de cinco años, en la cancha de Gimnasia y Esgrima La Plata, una contraposición: donde el Lobo lucha por no descender, Chacarita terminó de coronar la campaña con el logro máximo.
GERMÁN MARTINA
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