NINGUNA SORPRESA

Los semifinalistas de la UEFA Champions League son los que pensábamos. Claro que el fútbol es el deporte ilógico por excelencia y últimamente el nivel de los equipos se ha emparejado notablemente, pero ello no quita que los poderosos sigan demostrando por qué pretenden seguir siendo denominados de esa forma.

Ayer, repasamos que tanto el Liverpool como el Chelsea se habían clasificado a la siguiente ronda y deberán enfrentarse entre sí. Esta tarde, los dos que habían conseguido sendas victorias como visitantes, también lograron el pasaje a la cita anterior al partido cumbre. Manchester y Barcelona se estarán viendo las caras en lo que promete ser una serie a muerte y muy cerrada, protagonizada por dos gigantes del mundo del fútbol.

En Old Trafford, los Diablos Rojos llegaban con un 2 a 0 a favor conseguido en la ida en el Olímpico de Roma, ante el local. Ese resultado le daba tranquilidad a los ingleses, aunque ese sentimiento pudo cambiar rotundamente si Daniele De Rossi no fallaba -en el minuto 30 del primer tiempo- un tiro desde los doce pasos. Ese hecho agrandó a los locales y apichonó a los visitantes, quienes confiaban en el propio aprovechamiento de las situaciones aisladas para dar vuelta la serie, pero no contaban con la pésima definición del volante de la selección azzurra.

Ya en el complemento, Carlos Tevez (jugó los 90 minutos) puso su cabeza, luego de un centro de Owen Hargreaves, para hacer delirar a la multitud presente y darle el 1 a 0 definitivo a los de Alex Ferguson. El argentino tuvo una excelente actuación y sigue dejando el nombre de nuestro país en lo más alto.

Por otro lado, en el Camp Nou, el Barsa no tuvo inconvenientes en vencer 1 a 0 al Schalke 04 (gol de Yaya Touré) y ahora espera por la recuperación de Lionel Messi, quien expresó su deseo de estar presente en las semis del mejor torneo de clubes del mundo. Gabriel Milito, como siempre, fue titular y tuvo un buen papel en los de Frank Rijkaard.

DAMIÁN ORLANDI