¿Por qué nos preguntamos si la caída del Ciclón fue inesperada, sabiendo que su verdugo es de lo más flojo que hay en la actualidad en el país? Porque el estado de ánimo del equipo, ante una hinchada que pide a gritos un triunfo, está muy lejos de ser el ideal. Porque el técnico recién hoy pareció encontrar el esquema adecuado para los jugadores que posee, pero es un error gravísimo (costó una derrota) ponerlo en práctica en pleno partido. Porque el plantel llegó recién ayer por la mañana al país, proveniente de Venezuela, después de nada menos que un traspié inesperado ante el Caracas, como mencionamos antes. Porque el país entero espera que el Dream Team de la Argentina, como muchos lo han caratulado, reaccione ya y golee a sus rivales; y eso no es fácil de asimilar para un grupo de personas.
Son muchas las razones que hacen que el Ciclón no responda adentro de la cancha. Lo único que va a generar un click en la cabeza de los jugadores va a ser una victoria. Su gente debe apoyar al plantel y tener memoria. Si todos no tiran para el mismo lado, será imposible revertir este comienzo trunco.
DAMIÁN ORLANDI
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