CAMPEON DE VERANO

Contentos deben estar los hinchas de River porque hoy, su equipo se consagró campeón del Torneo de Verano. El conjunto de Diego Simeone venció a San Lorenzo 1 a 0 y revalidó el título obtenido un año atrás.

El encuentro mostraba, de movida, un cambio en el esquema que más le agrada al técnico. Pasó del 3-3-3-1 al 4-2-3-1. En la defensa, el pedido por los fanáticos, Paulo Ferrari, volvía a ser titular, y Cristian Villagra ocupaba el lateral izquierdo. Radamel Falcao aparecía como el volante ofensivo central, ya que no se lo podía considerar enganche debido a la presencia de Ariel Ortega en cancha. Nuevamente, Sebastián Abreu era el delantero centro. Y, vaya paradoja, a River le fue mejor con este sistema táctico que con el preferido por el "Cholo".

Hoy, los de Núñez jugaron su mejor partido en el verano y merecieron la victoria ampliamente. El equipo de Ramón Díaz mostró algo de buen fútbol en el primer tiempo, sobre todo por las efectivas excursiones al ataque que se mandaba Adrían González (si se recupera Cristian Tula, el ex Banfield será suplente, algo que no se entiende), que casi siempre terminaban con faltas de los defensores contrarios cerca del área. En la ofensiva, fue nulo el aporte de Bernardo Romeo y Andrés Silvera, quienes serían los atacantes del Ciclón en el comienzo de la competencia oficial.

En esa etapa, pocas chances para ambos conjuntos. En el complemento, fue todo de River. Dos penales tuvieron los de Simeone, sólo uno aprovechado: Sebastián Abreu convirtió su primer gol con la banda roja y pidió disculpas a la gente de San Lorenzo. En el segundo tiro desde los once pasos, Ferrari ejecutó a la izquierda, pero tapó bien Agustín Orión, una de las figuras del partido junto a Oscar Ahumada.

En el final del encuentro, los de Núñez se florearon con toques horizontales. Los dirigidos por Díaz reaccionaron de mala forma: Sebastián Méndez y Walter Acevedo se fueron expulsados.

DAMIÁN ORLANDI