Por lo visto hasta el momento en el Torneo Apertura y previo al último partido que se disputaba el día domingo, se estaba en condiciones de decir, que se enfrentaban los dos equipos que mejor fútbol desandaron a lo largo de las 14 fechas. Con el agregado de jugar ante su gente y de tener que defender la punta, Lanús no se dejó amedrentar y jugó el encuentro frente a Tigre con mucho temperamento. Desde el minuto uno, el conjunto de Ramón Cabrero demostró que tomaría la iniciativa del juego, y así fue como sucedió: con un Sebastián Blanco muy escurridizo, una delantera bien predispuesta y una defensa que brindaba mucha seguridad, el granate encontró el gol de José Sand, mediante un penal al minuto 16, y producto de una jugada que tuvo como protagonista a Biglieri quien caería en el área luego de la falta de Alexis Ferrero. Con la ventaja en el marcador, más se agrando y siguió con la posesión del balón hasta que llegó un pase erróneo de parte de Ribonetto para cederle el desborde a Ereros y a la postre, un centro preciso a la cabeza de Leandro Lazzaro que no falló y facturó de cabeza a los 33 minutos. Era la igualdad. De allí en más hubo mucha paridad hasta el final del primer tiempo. En el segundo, después de una falta cometida por parte de los de Cagna, cayó un centro al área para que, por atrás de todos, llegara Matías Fritzler e hiciera estallar al estadio con el grito de gol, cuando se llevaban 15 minutos del complemento . En los treinta minutos restantes se hizo presente la tensión y los nervios, y Tigre no encontró ninguna posibilidad para poder empatar. En contrapartida Lanús tuvo muchas chances para liquidarlo pero el marcador no se movería del 2-1.
Fue victoria para Lanús y la alegría de saber que una semana más, el torneo argentino los tiene en la cima de la tabla de posiciones. Y es ineludible mencionar los cánticos que bajaban de la cancha ubicada en Guidi y Arias que decían algo así como: "dale campeón...!"
GERMAN MARTINA
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