Decía que el caso de Montenegro me había llamado poderosamente la atención, porque lo del volante - enganche - media-punta - delantero del Rojo es justamente eso: no saber a qué y de qué juega. No hay dudas de que merece la cinta de capitán de su bochornoso equipo, pero él mismo debía ser conciente de que su momento no era el mejor al momento del tubazo. Brilló en 2002 en Avellaneda, descolló en River y se lució otra vez con la camiseta de Independiente; pero todo eso ya había quedado atrás.
Tildado de "pecho frío", los que lo apodan "Montehielo" tienen una visión particular para analizar a los mejores jugadores del país (lo mismo hacen con Riquelme, el mejor 10 de la Argentina después de Maradona y Ortega). Hoy, el Rolfi no es el que era. Hoy, el Rolfi fue el que era.
Montenegro + 10 sigue siendo el conjunto del verborrágico Gallego. En una tarde gris, en Parque Patricios, el que probablemente se ponga la camiseta de los distintos, esa que usó el ahora DT del "Equipo de Todos", metió tres goles (dos espectaculares) y le ganó el partido (él con el pobre de Assmann) al agonizante Central.
Fue 3 a 1 en cancha de Huracán (descontó Zelaya). Cancha en la que "Daniel Gastón" nació, verde césped en el que justificó su loca convocatoria a la Selección. Bien por D10s...
DAMIÁN ORLANDI
No hay comentarios:
Publicar un comentario