GERMÁN MARTINA
viernes, 4 de julio de 2008
CRÓNICA DE UNA FINAL ANUNCIADA
Por el andar de ambos jugadores, era de esperarse que la definición en Wimbledon sea entre el uno y el dos del mundo. Por la naturalidad, simpleza, facilidad y comodidad con que juega Roger Federer en césped, sumado a sus cinco títulos consecutivos en la Catedral logrados en los últimos años, no sorprende que el suizo haya llegado a la instancia decisiva. Hoy, Federer venció en semi al ruso Marat Safin por 6-3, 7-6 (7-3) y 6-4, para alcanzar su 66º triunfo consecutivo en la superficie más rápida y llegar a la final sin ceder sets. Por otro lado, Rafael Nadal llegaba con un antecedente importente: ganó hace dos semanas, su primer certamen sobre pasto en Queen. El mallorquín se deshizo del alemán Rainer Schuettler por 6-1, 7-6 (7-3) y 6-4 para arribar al partido decisivo y buscar revancha ante el mejor de todos, quien lo venció los últimos dos años. Pero Rafa irá por otro hecho histórico: intentará ser el primer jugador en sumar a Roland Garros y Queen´s, el título en Wimbledon. Algo que hasta aquí no alcanzó ningún tenista. Por el lado de Roger... el tan ansiado hexacampeonato, para romper el récord de Borg (hasta el momento están igualados) y seguir acrecentando su número de éxitos en césped.
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