SEGUNDO PASO EN FALSO

Hace un tiempo utilizamos la frase "Houston, no tenemos un problema" en alusión a la racha positiva que había conseguido el conjunto texano en la temporada regular de la NBA. Los Rockets acumularon 22 victorias consecutivas y ya no había palabras para describir la brillante performance que estaban teniendo en la Liga más importante del mundo. La clasificación a los Playoffs se dio por decantación, pero sabemos que en la postemporada hay que demostrar otra cosa: no alcanza con jugar bien, hay que sacar chapa de campeón. Por ahora, a Houston le está costando adaptarse a los partidos de eliminación directa, pero deben tener cuidado, porque en dos encuentros se puede terminar la ilusión de quedarse con un anillo que la franquicia no obtiene hace 10 años.

Sucede que la serie que están afrontando ante Utah debería ser la más disputada de los emparejamientos de las dos Conferencias. Los Jazz son un equipo duro y están compuestos por un quinteto que es de lo mejor de la Liga, y además ahora se le ha sumado el aporte del ex Philadelphia, Kyle Korber, quien cada vez que ingresa tiene un óptimo rendimiento. El primer partido se lo habían quedado los de Jerry Sloan, y ayer pasó lo mismo: 90 a 84 fue el resultado en favor de los liderados por su base Deron Williams, quien anotó 22 unidades, y el turco Mehmet Okur, autor de 16 puntos y quien bajara nada menos que 16 rebotes. Por el lado de los derrotados, Tracy McGrady marcó 23 unidades y Luis Scola (debió abandonar el partido antes de tiempo por haber cometido seis faltas), 14.

Luego de este análisis del presente de los Rockets, estamos en condiciones de decir: "Houston, tenemos un problema", parafraseando correctamente las palabras utilizadas en la película Apolo XIII. Porque además de que los Jazz lideran 2 a 0, lo más preocupante es que ahora la serie se trasladó a Utah. Sí, los primeros dos juegos se disputaron en Texas y los de Rick Adelman no aprovecharon la localía. Si pretenden pasar a las semis del Oeste, deberán triunfar en cuatro de los hipotéticos seis partidos que restan. Difícil, pero no imposible...

Además...

Cleveland Cavaliers 106 (2) - Washington Wizards 86 (0)

DAMIÁN ORLANDI