Suficiente tranquilidad y parsimonia demostró
Roger Federer para llevar a cabo su partido de octavos de final del Abierto de Australia, en el cual se podía poner en tela de juicio, cuanto le podía jugar en contra el extenso encuentro de tercera rueda ante
Janko Tpsarevic. Sin embargo, no se evidenció en el suizo ningún rastro de cansancio y se deshizo sin problemas de un rival que suele complicar cuando mantiene cierta regularidad: el checo Tomas
Berdych. El resultado favorable al número uno del mundo por 6-4 7-6 y 6-3 para clasificarse a cuartos y medirse con el estadounidense James
Blake, verdugo del joven croata
Marin Cilic por 6-3 6-4 y 6-4. Los dos pleitos que completaban el pasaje a los ocho mejores del certamen eran los de los españoles, David
Ferrer y Juan Carlos
Ferrero (el cual fue favorable para el número 5 del escalafón mundial por 7-5 3-6 6-4 y 6-1) y el de
Novak Djokovic con el local
Lleyton Hewitt, que quedó en manos del
serbio en
sets corridos.
Ahora, Federer-Blake y Ferrer-Djokovic son los restantes cruces de cuartos además de Tsonga-Youzhny y Nieminen-Nadal.
Por el lado de las damas, se cumplió la lógica en tres de los cuatro encuentros: Ivanovic derrotó a Wozniacki, Venus Williams a Marta Domachowska, Hantuchova a KJirilenko, en cambio perdió Nadia Petrova frente a la polaca Agnieszka Radwanska; para completar así los emparejamientos de cuartos.
GERMAN MARTINA
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